viernes

Diez

Octubre tiene sabor a naranja
que a esta hora de la noche
perfuma el paso de la soledad

por las calles áridas de mi cuerpo

Nueve

Esta vez no hablaré de ti
Hace días que siento arder mi pecho
con la flama de soledad que tengo
He vuelto a la calle a llorar incendios
a ver la imagen desnuda
de otra imagen que se repite
me ve y se retira
Todo tiene sentido a la hora en que
me duelo
incluso la noche huele a contrita
esperanza
y heme aquí lleno de fuego
abrazado solo al frío
como la pulpa que el viento
dejó caer con su lluvia