martes

Eran las tres de la tarde. Tomas regresó a casa. La tarde caía desmedida bajo medias creadas por las nubes. Llovía sol aun así la humedad de la lluvia por la noche se olía a distancia. El clima de la región es agreste, a veces frío, calor, o nada. Los días no tenían sentido de clima. Tomas debía llevar colgado al brazo lo mismo un suéter, el paraguas, o caminar desnudo. Abrió la puerta de entrada a la casa. Sintió el olor a humedad antes descrito, viró la cabeza como si le hubieran palmeado el hombro, no vio nada. Puerta de madera, caoba labrada; picaporte del mismo color al de caoba, introdujo la llave, pensó, abrió la puerta, sintió de nuevo el golpe en el hombro, no vio nada. La cama, el mueble para los libros, la sala, otros muebles, a la izquierda la cocina, otros muebles: Tomas sintiéndose otro mueble. Recordó la frase: are you there; tomó un vaso con agua del refrigerador, observó la sala, prendió la televisión, nada, el estéreo. Recuerdo cómo le hacía llorar esta canción: Adiós, partí. "El autobús dejó, nuestra ciudad llorona... no es justo hablar de esta forma, pero me duele la sombra... quizá no deba contarte, pues es quitarme la ropa, para enseñarte una herida, que tú, que tú ocultas a solas". Real de catorce, Tomas esnifó. Bebió el vaso con agua. En la cocina había huevos fritos, con un poco de hambre se los comió, quizás a fuerza de llenarse de algo. Repitió la canción, recordó otra vez. Yo sé que a Tomas le gusta el whisky, los cigarros y le teme con horror a los espacios, como ése en el que se encontraba. Cantó con José Cruz la canción. Una vez le pregunté, oye Tomas, adónde lleva este camino. No sé. A ningún lugar. Yo soy de ningún lugar. Contestó. Adónde lleva este camino se preguntó. Vacío, vacío, plas, plas. Bebió una botella de Whisky. Adónde lleva este camino se preguntó. Clock, clock, plas, plas. La luz de la lámpara colocada a un lado de Tomas, proyectaba una luz trémula, sencilla y terrorífica, caía igual que después de la lluvia, húmeda. La sombra de Tomas viró, la luz perfiló la punta del sofá. Adónde lleva este camino. Plas, plas, plas. La casa vacía, entró Tomas al cuerpo desnudo de la sala, los muebles y él un mueble más.



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